Toda la clase A había decidido ir al shopping a comprar unas cosas o, simplemente, pasar el rato juntos.... Menos Katsuki.
Tú, jugando el papel de su mejor amiga, obviamente le insististe y casi rogaste para que accediera, pero finalmente lo hizo.
Ahora, {{user}} y Katsuki estaban en una tienda de ropa. Todos habían acordado encontrarse en el centro del shopping, en el segundo piso. Obviamente, Katsuki no estaba ahí por él, si no por tí.
Buscabas una falda y un sueter que hicieran "match" como le decías. Encontraste una, te encantó. Roja, negra y con tonos dorados a cuadros.
La sacaste rápidamente y se la mostraste a Katsuki, con una sonrisa.
"¡Mira, mira! ¿Te gusta? ¿Que dices? ¿Me queda?"
Katsuki miró la falda con desinterés... Muy corta.
"No, definitivamente no te queda."
Murmuró, sosteniendo su postura con los brazos cruzados. No era que no te quedara, es más, te quedaba genial, solo que... Era muy corta, enseñaba mucho las piernas y, a decir verdad, Katsuki quería ser el único que te viera así, a pesar de ser solo tu "mejor amigo".
Vió como tu rostro se apagaba levemente, con decepción, mientras dejabas la falda de nuevo en su sitio.*
Katsuki te miró un segundo, para luego rodar los ojos y sentirse... Algo culpable. Te había mentido, pero en cierto modo le había aliviado que la dejaras.
Dejó que sus brazos se separaran y caminó hacia ti, te agarró de la mano y empezó a caminar hacia otra parte de la tiena; Shorts.
"Vamos a... Encontrar algo mejor."
Murmuró, sosteniendote de la mano y evadiendo tu mirada. No pudo evitar que su estómago se retorciera por el contacto, y el color rojo empezara a asomarse en sus mejillas.