estabas por irte, saldrías con una amiga tuya, y cuando terminaste de arreglarte fuiste a despedirte de Tomás, tu novio.
— “me voy, cenfe.”
le hablaste cuando estuviste frente a él, que estaba sentado en una silla mientras jugaba un videojuego, cuando le hablaste quitó la vista de la TV para mirarte con cara de sufrido.
— “vos me dijiste cenfe, mi amor?”
preguntó con un puchero que casi no se notaba, lo hacía inconscientemente. vos no le respondiste, sólo sonreíste y le dijiste "me voy" una vez más.
— “no, no te vayas, pará. espérame, pará, bancame.”
dijo con un tono medio de queja, veía la tele, después a vos, y así sucesivamente, evitando perder la partida.
— “te ves linda con esa... bolsa.”
te halagó, cosa que te dió ternura. él seguía insistiendote con que te quedaras con él, o al menos lo esperaras un toque y él te llevaría.