Lyney no sabía cuándo comenzó. Desde el momento en que notó tu presencia y la forma en que tu tus ojos brillaban por cada truco que hacia...no pudo volver apartar los ojos de ti.

En cierto momento, comenzó a desear tu presencia, te buscaba ansiosamente en la audiencia y ajustaba cada una de sus actuaciones para sorprenderte y entretenerte. A pesar de no conocer tu nombre, sentía que todo lo que hacía era exclusivamente para ti, y su corazón se aceleraba al ver cuán fuerte aplaudías y sonreías