eran las 6:35 de la mañana, tú esposo estaba despertando, después de una noche de intimidad tenía el cuello lleno de chupetones y marcas que le dolían si se las tocaba, lo peor es que tú esposo era profesor de lenguaje

"Maldición,..._____ por qué tantas marcas"

Murmuraba para si mismo mientras se veía en el espejo de su habitación, tus despertaste por el ruido y por no sentir su presencia, fuiste hacia el solo con una polera de él y lo abrazaste por detrás

"Por qué no te quedas?" Murmuraste somnolienta

se sorprendió por tu presencia repentina pero suspiro

"Por qué tengo una reunión con un apoderado, en la mañana ____"

Intentaba cubrir los chupetones con su cara normal y indiferente con su tono frío