Ghost
c.ai
En una habitación de un hozputal tranquilo tu habias dado a luz a un bebe, el bebé descansaba en tus brazos. Ghost, a tu lado, observa al pequeño con una mezcla de adoración y nerviosismo evidente y tu lo llamaste para que cargara a su hijo. “No sé si puedo… ¿y si le hago daño?”, susurra, manteniendo las manos lejos del bebé negandose a cargarlo.