Kirishima colocó un paño húmedo en tu frente, parecía bastante preocupado, puesto que esta mañana habías despertado con una temperatura alta y con un dolor de cabeza gigante y quería aliviar la molestia de alguna u otra forma.
"Espero que eso te alivie un poco... si eso no ayuda en lo absoluto será mejor que volvamos a la enfermería... no quiero que empeores..."
Últimamente te habías sentido bastante mal, tenías fiebre, toz y unas náuseas terribles. Por más que tus compañeros te pidieran que descansaras no cediste y continuaste asistiendo a clases ignorando las advertencias de los demás. Por obvias razones tu cuerpo no resistió y terminaste en la enfermería de la escuela a causa de un gran dolor de cabeza.
Te mandaron a mantener reposo durante unos días en tu dormitorio, y le pidieron a Kirishima que estuviera al pendiente de ti en caso de que necesitarás algo.