El vecindario entero estaba reunido, los niños preparándose, los padres animando, y Sparky… Sparky corriendo en círculos, pura energía y alegría

Víctor se puso la ropa del. Equipo, entrando a la cancha de mala gana {{user}} y Sue estaban en la pequeña grada improvisada, aplaudiendo para darle ánimo.

Víctor asintió, y se concentrado, por primera vez en el bate y la pelota

Pero Sparky… oh, Sparky.

Un momento logro darle a la pelota que salió disparada, la emoción hizo que empezará a correr, el perro movió la cabeza, siguiendo el moviento de la pelota y sin dudarlo salió corriendo hacia la pista justo cuando los autos cruzaban

"¡Sparky!" gritó Víctor, desesperado.

{{user}} se puso de pie de inmediato.

Todo pasó tan rápido…

El auto avanzó a toda velocidad que no freno a tiempo, Sparky atravesó la pista justo enfrente de él, persiguiendo la pelota

El auto se desvió, giró bruscamente y envió a Sparky rodando fuera de la pista.

Un silencio brutal cayó sobre el lugar.

Víctor soltó el control remoto y corrió hacia su perro "¡¡Sparky!! ¡Sparky!"

Sue se cubrió la boca {{user}} sintió que el estómago se le hundía mientras bajaba los escalones de dos en dos. La gente murmuraba, retrocedía, pero él solo escuchaba a su hijo llamando desesperado

Cuando llegó al lado de Víctor, lo vio arrodillado, tomando el pequeño cuerpo de Sparky entre sus brazos. El perro no reaccionaba "Papá…" dijo Víctor, con la voz quebrada y los ojos inundados "Papá, no… por favor no…"

Sue cayó de rodillas al lado de ellos, sin contener el llanto.

{{user}} se agachó despacio, tocando el lomo de Sparky con una suavidad reverente

El pequeño cuerpo estaba quieto. Demasiado quieto.

{{user}} tragó duro, sintiendo los ojos arderle.

"Hijo…todo.. Estará bien" intentó decir, pero la voz no le salía fuerte como quería

Víctor temblaba, abrazando el cuerpo de Sparky como si pudiera devolverle el calor. Sue le acariciaba el cabello, llorando con él.

Y {{user}}, con el corazón estrujado, sostuvo a su familia en silencio No había palabras que arreglaran eso. No había explicación que suavizara lo cruel de ese instante

Solo quedaba acompañar a su hijo mientras veía apagarse la luz más brillante de su pequeño mundo

Ya había pasado un par de días desde que sparky falleció.. La noche estaba tranquila, demasiado tranquila para esa casa que hacía apenas unas horas había perdido su chispa… la que Sparky daba con solo ladrar y correr por la casa

{{user}} estaba sentado en el sillón del living, con el cuerpo ligeramente caído hacia atrás, los ojos aún hinchados por el día que habían pasado. Sue, su esposa, estaba a su lado, apoyada en su hombro, buscando consuelo en la presencia del otro porque ninguno de los dos encontraba palabras que realmente alcanzarán su partida

Habían puesto una película, una de esas antiguas en blanco y negro que a Víctor le encantaban, intentando llenar el silencio que dejó Sparky en la casa… pero aun así, por que aunque a ellos les doliera, sabían que esto era más difícil para Víctor

susurró Sue con la voz quebrada "Víctor lo adoraba…"

{{user}} asintió despacio, sin decir nada, porque no habia palabras para ponerle nombre a aquel sentimiento Ver a su hijo despedirse de su mejor amigo había sido como verlo perder una parte de su infancia de golpe.

Tomó aire, dispuesto a cambiar de canal, cuando un ruido ligero se escuchó cerca a las escaleras

Sue levantó la mirada, confundida "¿Escuchaste eso?"

"Mhmm…" {{user}} se incorporó, frunciendo el ceño "Víctor aún debe estar despierto"

Otro ruido. Un tropezón

Sue abrió los ojos, preocupada "deberías ir a ver.."