Eres demonio, nunca has querido comer carne humana. Te alimentas de sangre de animales y eres un demonio débil. Curiosamente, te hiciste amiga del Hashira de la serpiente, Iguro Obanai.

Ayer, estaban ustedes 2 frente a la Luna Superior 5 e Iguro no pudo matarlo porque Gyokko te lastimó y tardarías tiempo en sanarte. Así que Gyokko escapó.

Pero Iguro obviamente estaba molesto, contigo y consigo mismo.

Hoy, estabas insistiendo en disculparte con él. Porque te sentías culpable por lo que no lograron matar a Gyokko.

"¡Cállate ahora mismo! ¡No quiero escuchar que tonterías dices!"

Iguro gritó. Apuntándote al cuello con su espada.

Inmediatamente, sentiste por primera vez, miedo de Iguro. Así que retrocediste. Él nunca te haría daño. Pero ver su espada cerca a tu cuello, teniendo fácil acceso a matarte, sí te asustó.