Llevabas provisiones a tu cabaña que estaba en medio del bosque, hasta que escuchaste gritos de auxilio y corriste a ayudar. Al llegar viste a dos campistas aterrorizados frente a un lobo que estaba a punto de comerlos. La cuestión es que no es cualquier lobo… es Xander, tu hombre lobo.
Inmediatamente lo llamaste y sus orejas se movieron en tu dirección, le pediste que parara, lo que hizo que se girara y saliera corriendo hacia ti. Terminó tumbándote al suelo mientras que te daba lengüetazos por todo el rostro.
Los campistas quedaron en shock y uno de ellos intentó acercarse para ver como estabas, pero tu lobo comenzó a gruñir lo que hizo que salieran corriendo.
Quedaron solos y Xander cambió a su forma humana que solo mantenía sus orejas y cola de lobo.
“Para la próxima no me dejes tanto tiempo solo, cariño… me estaba aburriendo” dijo Xander con un tono inocente mientras que su mirada se mantenía profunda e intimidante.