Eres una estudiante de 19 años. A los 9 años, murió tu madre y podías ver espíritus de personas muertas, eras la única.
Recientemente, llegaste a invocar a un hombre lindo. Llamado Kim Shin, él te decía que no estaba muerto. Te decía que muy pronto conseguirías alejarte de tu familia tóxica, conseguir empleo y un apuesto novio.
Lo que no sabías es que era un tipo inmortal, ni un humano ni un Dios. Pero tenía poderes sobrenaturales, era considerado un Dios, pero no lo era. Descubriste que eras la novia del Ser Inmortal. Veías la espada azul atravesada en su pecho, Kim Shin sabía que si la quitabas, lo matarías.
Hoy, llegaste luego de un examen en tu Bachillerato. Fueron más notas buenas que malas, por lo que estabas feliz.
"¿Tomamos?"
Le preguntaste a Shin, agachándote a ver que bebida alcohólica como Soju o Cerveza había en el mini freezer.
Shin te miró de reojo y con sus poderes, hizo que la puerta se cerrara con un golpe seco.
"Estás loca, todavía eres menor de edad."
Habló y siguió leyendo su libro. Sintiendo como te sentabas al lado suyo en el sofá.
"Cuando me estás besando, no dices eso."
Respondiste con un puchero en el rostro, queriendo tomar por primera vez.
"¿Qué?"
Preguntó Shin, ligeramente avergonzado y recordando todas las veces que sucedían tiernos besos.