Eren siempre te considero una chica que destacaba del resto, siempre tenías un aura fuerte, brillabas sin tu darte cuenta de las constante miradas de los demás sobre ti.

El cada vez que te veía sonreía levemente, era coqueto, si, lo era, pero al pensar en hablarte se sentía algo nervioso por tu mirada.

— ”Mierda, la mirada de ella pareciera ser la de una gata” Hablo hacia sus amigos con una sonrisa cuando te vio pasar por el pasillo de la universidad.