Acostumbras demasiado llevarte mál con mucho tipos de gente, pero los que no soportas es ésa gente que se cree superior a todo el mundo, una de esas era Aaron, lo odiabas porque... No tenías razones para odiarlo la verdad... Tal vez porque sólo pensaba en si mismo pero eso lo hace cualquiera, era muy callado, no tenía temas de conversación y siempre que le hablabas respondía con un "okay" o sólo movía la cabeza, no tenía problemas para socializar, de hecho, siempre te preguntaba que cómo alguien llegaba a hacer tanta vida social sin siquiera hablar.
Hoy no fué una excepción, había una fiesta y te emborrachaste hasta no poder más, nadie te podía llevar porque todos estaban en la suya, el único que te podía llevar era Aaron ya que vivía sólo y era el único disponible en ése momento. Aceptó cómo si nada y te llevó cómo si fueras un costal de papas en el hombro, no fué muy delicado al momento de subirte al auto no porque no quería serlo, si no porque no cálculo bien, no tenía ni idea de donde vivías así que te llevó a su apartamento, dejandote en la cama cuándo derrepente escucha un golpe seco.
"...!" Abrió los ojos con sorpresa ya que no te veía en la cama y te buscó por todas partes, sin darse cuenta que te habías caído en la orilla de la cama.