El Tulipán de Gotham: Capítulo 16 La Vulnerabilidad del Murciélago El Silencio Cargado Días después de la confrontación por Doctor Strange y la revelación del Clan LeBeau, el ambiente en la Mansión Wayne era tenso. {{User}} había regresado, pero Bruce no la había confrontado con más gritos. En cambio, había adoptado una actitud de cariño excesivo y desesperado. Estaba constantemente cerca de User, tocándola de forma innecesaria: un toque persistente en la parte baja de su espalda al caminar, un beso inesperado en la frente mientras ella leía, una mano que se detenía en su vientre un segundo de más. Esa tarde, Bruce se sentó junto a User en el salón, sin decir nada sobre la Liga o las misiones. Solo la observó mientras ella trabajaba en su portátil.
BRUCE: (Su voz era suave, casi suplicante) "Estuviste maravillosa en la reunión de la junta hoy. El proyecto de energía limpia es brillante."
{{USER}}: (Sin levantar la vista, consciente del juego) "Es solo lógica, Bruce. Nada de magia, nada de clonación."
Bruce se encogió, la indirecta le había dado justo donde dolía. Él deslizó su mano sobre la de ella, deteniendo su trabajo.
BRUCE: "Lo sé. Pero me gusta más cuando esa lógica se queda aquí. Conmigo."
Bruce no pedía, reclamaba su atención con una vulnerabilidad que era difícil de rechazar. Su miedo a ser "borrado" o "reemplazado" lo había convertido en un animal herido que solo buscaba consuelo. La Espera en la Cama Esa noche, User entró en su dormitorio. La luz estaba baja. Bruce ya estaba en la cama, en el centro de las sábanas de seda. No estaba leyendo ni trabajando. Estaba simplemente esperando, su mirada fija en la puerta. Bruce se sentó, con el torso desnudo. User pudo notar inmediatamente el entrenamiento implacable: los músculos definidos, las cicatrices sutiles de la Baticueva. Pero esta noche, la perfección física no era una armadura, sino una ofrenda. User se acercó a la cama, sintiendo la necesidad palpable de su esposo. Ella se deslizó bajo las sábanas, su cuerpo encontrando el de él. Bruce no se lanzó sobre ella, sino que se acercó con una ternura inesperada. Comenzó a besarla suavemente, sin urgencia, pero con una necesidad profunda. Acarició su rostro, su cuello, su hombro.
BRUCE: (Susurrando contra su piel) "Te extrañé. El mundo es demasiado ruidoso cuando no estás aquí."
El momento de la verdad llegó cuando Bruce se quitó el resto de la ropa. Se acercó a {{User}}, con su cuerpo fuerte y vulnerable expuesto. Él no la miró a los ojos, sino que dejó caer su mirada, con una melancolía que no tenía nada que ver con el deseo.
BRUCE: "Sé que la otra versión de mi te dio hijos. Y que la otra yo fue un infeliz. Y sé que ese ladrón te da risa y esa magia te fascina. Pero escúchame bien, {{User}}."
Bruce puso su mano suavemente sobre el vientre de ella, el lugar donde anidaba el fantasma del Clan LeBeau.
BRUCE: "Yo no quiero fantasmas ni copias. Yo te elegí a ti. Dame la garantía que no pudiste darle a nadie más. Dame un hijo con mis ojos."