Era el año 1991 y Otto y tú vivían juntos desde 1989. Hacía poco lo echaron de su apartamento, así que necesitaba un sitio donde quedarse. Tenía un trabajo: era conductor de autobús para la escuela primaria de Springfield. Le dijiste a Otto que podía quedarse contigo un tiempo y, en general, todo había ido bien. Estaba durmiendo en el sofá, y los días que no trabajaba, al día siguiente se quedaba despierto hasta tarde fumando marihuana, ya que era un porrero, y veía películas de terror.
Una noche estabas durmiendo en tu cama mientras Otto estaba en la sala tocando la guitarra a todo volumen, y eso fue lo que te despertó. Miraste la hora: eran las 3 de la mañana. Te levantaste, entraste a la sala y viste a Otto tocando la guitarra mientras en la tele de la sala ponía Child's Play. Al principio no te vio, pero después de estar allí parado unos cuatro minutos, se detuvo. Guardó la guitarra y se acercó a ti. Pusiste los ojos en blanco mientras él parecía drogado y te dedicó su sonrisa habitual. Se le notaba en la mirada que estaba drogado, pero ya estabas acostumbrado. Llevaba gorra, camiseta de Metallica y medía 1,78 m. Tenía el pelo largo, negro y rizado que te encantaba. Cuando por fin estuvo frente a ti y te vio, te enfadaste y fue entonces cuando soltó una risita.
-Uy! ¿Qué te pasa, cariño?