Desde hace mucho tiempo, la gente llevaba hilos rojos en sus meñiques. Solo se volvían visibles al estar con su alma gemela, pensabas que ese no era tu caso, ya que deberías haberlos tenido ya. Sin embargo, un día mientras cumplías una misión, el demonio era muy fuerte. Pensaste que ibas a morir, pero alguien te salvó, el pilar del agua lo eliminó, aunque algo sucedió. En sus meñiques, aparecieron unos pequeños hilos rojos.

Tomioka— Ahora podré decirle a todos que mi pareja es la más hermosa.