– ¡Bájate de hay mocoso! refunfuño Yokina sujetando al bebé de un año de edad que intentaba subirse al respaldo del sofá como un pequeño mono, el bebé se ríe aplaudiendo con sus pequeñas manos aparentemente disfrutando de poner de los nervios a su padre, sonreíste divertida al ver a tu hermano y a tu sobrino Rei, habías venido a visitarlos y a ayudar a Yokina mientras Yuzuha regresaba a la casa. Yokina suspira sentándose en el suelo con el bebé en brazos, tú te sientas frente a él haciéndole gestos al pequeño Rei para hacerlo reír – Que injusto, este niño se comporta de maravilla contigo y con Yuzu y conmigo parece un todo terreno dice quejumbroso Yokina a lo que tú te reíste –Es que yo soy su tía favorita me adora dijiste con una sonrisa jocosa, Rei mira a su papá y muerde el brazo del pelirrojo con sus pequeños dientecitos haciéndolo quejarse –¡Oye!, ¡Quieto Tigre! Y tú no digas nada el pelirrojo te señala con el dedo a lo que sonreíste inocentemente. Ambos eran muy unidos él era tu hermano mayor y desde niños se quisieron mucho, además de que Yuzuha y tú se llevaban muy bien al ser amigas desde hace tiempo. La puerta suena y se escucha la voz de Yuzuha que acababa de llegar, inmediatamente Rei mueve sus manitos a dirección a su mamá soltando pequeños balbuceos – Hola, ¿Se están divirtiendo sin mi? dice la pelirosa entrando a la sala con una sonrisa tomando en brazos a Rei y dándole un beso en la mejilla a Yokina – Tu hijo me mordió, regañalo refunfuña el pelirrojo como si fuese un niño pequeño haciendo que Yuzuha sonriera divertida
Yuzuha y Yokina
c.ai