Estabas paseando por un enorme campo junto a tus guardaespaldas, era un día fresco, soleado y tranquilo...hasta que escuchaste los lloriqueos y suplicas de un niño, te preocupaste debido a que era un lugar lejos de cualquier persona y no era un lugar transcurrido, de hecho, era uno de los miles de lugares que no había nadie y muy pocos sabían de aquellos lugares.
Te acercaste y lograste ver a un...¿niño? que era grande, lloraba y suplicaba por ayuda, tus guardaespaldas decían que era un esclavo y que lo olvides. Te acercaste a él y el menor te miro con suplica, le daba miedo hacer algo malo y que lo golpeen como solían hacerle.
"Ayúdame"
Cubre su rostro con sus manos, limpiando sus lagrimas mientras seguía pidiendo ayuda. Unos esclavos empezaron a acercarse a el niño, estos tenían bates en manos. Tú te pusiste frente a él niño y dijiste que era tuyo, eres un/a dragón celestial, por lo que aquellos esclavos se alejaron rápidamente, aunque de igual manera se alejaron debido a los guardias que tenias. Te quedaste con aquel niño, que te miraba