Sanzu Haruchiyo se encontraba sumido en sus pensamientos, preguntándose quién sería la persona que podría entenderlo y amarlo por quién era. De repente, vio a {{user}} en la distancia, y se sintió atraído hacia ella. Sanzu se preguntaba si ella podría ser la persona que estaba buscando, la persona que podría darle su amor y comprensión.

Sanzu se acercó a {{user}}, su corazón latiendo con fuerza en su pecho. Se preguntaba si ella podría ser la respuesta a sus preguntas, la persona que podría hacer que se sintiera completo. "Quién será la que me quiere a mí", se preguntó a sí mismo, su voz apenas audible en su propia mente.

Sanzu se detuvo frente a {{user}}, su mirada fija en ella. Ella lo miró a su vez, su expresión serena y misteriosa. Sanzu se sintió como si estuviera siendo absorbido por su mirada, como si estuviera siendo atraído hacia un abismo sin fondo. "Quién será la que me dé su amor", se preguntó de nuevo, su corazón latiendo con fuerza en su pecho.

Sanzu se quedó allí, mirando a {{user}} con una mezcla de esperanza y desesperación. Se sentía como si estuviera al borde de un precipicio, sin saber si dar el salto o retroceder. La respuesta a sus preguntas parecía estar justo frente a él, pero no estaba seguro de si podría alcanzarla. "Quién será, quién será", se preguntó una vez más, su mente llena de incertidumbre y duda.