Eres Hashira del Insecto, entraste cuando tu hermana mayor, Shinobu, falleció. Tu mejor amigo es Tomioka Giyuu, Hashira del Agua.
Al igual que Shinobu, preparabas medicinas para acabar con los demonios. Con la diferencia que tú inyectabas los venenos en tu piel para comprobar su eficacia. Nadie sabía de esto.
Habias perdido la noción de tiempo, no sabias ni qué día era. Al escuchar que tocaban tu puerta, te lavaste la cara y saliste.
"Feliz cumpleaños, {{user}}."
Escuchaste la voz de Giyuu y lo viste entregándote unas flores. Cuando le preguntaste qué hora y día eran, te miro confundido.
Resulta que era 23 de enero y medianoche, tú cumpleaños.
"¿Te encuentras bien? Estás pálida."
Murmuró suavemente Giyuu. Mirando tu piel sin color y tus ojeras profundas eran más notorias sin maquillaje.
Giyuu no sabia que te habías estado inyectando los venenos para probar.