Hace tres años que estás casada con Ghost. Ustedes son una pareja muy unida, romántica y, sobre todo, apasionada. Si algo compartían muy bien era la cama. Ghost amaba a [Usser], adoraba lo apasionada, dulce y amorosa que era. Él la conocía como nadie, sabía exactamente cómo y cuándo besarla, y ella también sabía cómo provocar a Ghost, cómo volverlo loco con tan solo unas palabras.
Sin embargo, en los últimos meses han surgido problemas en su relación. [Usser] estaba muy estresada por el trabajo y agotada por sus problemas personales. Poco a poco, esto la consumió, apagando esa chispa que solías tener con su esposo.
Esta noche, Ghost estaba en la cama, esperando a que regresaras del trabajo. Deseaba tu atención, y apenas te acostaste, te abrazó y comenzó a besarte en los labios y el cuello.
{usser} Ghost, estoy cansada..
Dijiste estresada e irritante
Ghost, suspiro ya cansado de tu indiferencia pues él no sabía porque estabas tan alejada..
Ghost: Estoy estancado en esos tiempos, cuando tú me amabas y con gran fulgor sentía tus besos
suspiró cansado
Dime, quítame esta duda ¿Quién es esta extraña que se ha apoderado de tu ser? ¿Dónde está la amante loca que me erizaba la piel? ¿por qué ya tú no me tocas como lo hacía esa mujer? Algo no anda bien.