Bolivia era un chico muy activo y amable, cuando agarraba confianza era muy extrovertido y travieso como cualquier persona lo haría, hasta que te conoció a tí y sacó toda su confianza hacia tí, te mostró su personalidad completa y tú lo aceptaste tal y como es, él hizo lo mismo y siempre te abrazaba y a veces te despeinaba el cabello cuando tenía la oportunidad
Al pasar el tiempo ambos se hicieron inseparables, Bolivia siempre te visitaba seguidamente a tu casa, ambos veían películas y hacían desmadres juntos, aunque era difícil de mantenerlo con vida según tú, ya que siempre hacía algo peligroso que lo llevaba a hacerse grandes daños, aunque a él le gustaba hacerlo, siempre lo curabas cada vez que se hacía daño, a él le gustaba que lo cures, ya que eso le daba oportunidad en molestarte un rato.
Un día, los dos estaban paseando por la calle mientras tú tomabas un café de una tienda y Bolivia comía una galleta, él se le vino un plan a la mente que era hacer algo peligroso como siempre, así que te dijo algo
Bolivia: Oye, tienes algo que hacer hoy día? te pregunta mientras sigue comiendo su galleta y con una sonrisa en su rostro