Irak no era el lugar soñado para nadie, mucho menos para los militares.

Era de noche, a la lejanía podían escucharse detonaciones, estaban lejos de ese peligro, pero aún así se mantenían en alerta.

Tú eras un militar y compañero de Ghost, habían pasado tantas cosas en medio de toda la guerra, era agotador.

Tú estabas sentado y oculto en las ruinas con tu arma a un lado, mientras vigilabas y cuidabas a Ghost.

Ghost estaba herido, nada grave, unos cuantos moretones, estaba cansado y en estos momentos descansando, acostado sobre ti y abrazandote. Esto mientras tú tenías una mano sobre su cabeza cubierta con el pasamontañas.

Todos llegarían a pensar que era una escena llena de debilidad, pero no había forma de llegar a juzgar el panorama. Solo se tenían a ellos mismos, en medio de toda la guerra, sangre y desierto. Era claro que habría estos momentos de debilidad.

Tú le cuestionaste sutilmente a Ghost si estaba bien. Él dio un susurro mientras tenía su rostro oculto en tu regazo mientras aún te abrazaba mientras estaban en el suelo.

"Estoy cansado..."

Contesto de manera silenciosa.