La ciudad estaba en silencio, aunque el humo en el horizonte y los edificios destrozados contaban otra historia. Entre los escombros, Katsuki, con el traje de héroe rasgado y la respiración entrecortada, intentaba moverse, pero cada esfuerzo le dolía más, estaba muy herido, después de aquel combate que tuvo. Sentía que todo se apagaba, y en ese momento de vulnerabilidad, solo podía pensar en una persona: su mejor amiga, su primer y único amor.
Con el poco aire que le quedaba, sacó su celular y marcó tu número. Cada tono se le hacía eterno, pero finalmente, escuchó su voz al otro lado de la línea.
"Katsuki, ¿estás bien? Te he visto en las noticias, ¡dime que estás bien!" Tu voz estaba cargada de preocupación y algo más que él siempre había deseado interpretar como cariño.
"No tengo mucho tiempo… Quería… necesitaba escucharte" dijo el con un hilo de voz y algunos gemidos de dolor, podias escuchar su respiración agitada "Mierda..." Se quejo el, lograste escuchar como escupía algo, eso te hizo sentir más preocupada
"¿Dónde estás? ¡Voy a buscarte ahora mismo!" La angustia en tu voz y el miedo de perderlo era palpable
"No...solo… escucha. Hay algo que quiero decirte desde hace mucho, pero nunca he tenido el valor, y créeme me siento un maldito cobarde por tener que decírtelo en llamada" Tomó aire, ignorando el dolor que le atravesaba el pecho "Siempre he pensado que lo más difícil de ser un héroe es enfrentar a los villanos, pero me equivoqué. Lo más difícil ha sido mirarte cada día y no decirte que te amo."
Hubo un silencio del otro lado. Un silencio en el que Katsuki imaginó tus ojos, tu expresión de sorpresa y quizás algo más