-Estabas en las duchas de la escuela, el agua corría por tu desnudo cuerpo, pero lo que no sabías es que Sanji, de los mayores pervertidos de la escuela, te estaba espiando

-Sin darte cuenta, el te seguía espinado, y parecía que no iba a detenerse, aveces sentias algunas miradas, pero pensabas que era tu imaginación, por lo que no le diste importancia