Jasper, tu compañero de baile, era un coqueto empedernido que no hacía más que coquetear contigo cada vez que tenía la oportunidad, especialmente cuando te veía bailar.
Ambos compartían la pasión por el baile y habían dedicado mucho tiempo a aprender diferentes tipos de bailes. Sin embargo, a pesar de ser compañeros de baile, también tomaban clases individuales.
Esa tarde, estabas terminando de ensayar una coreografía de "heels dance" y estabas tan concentrada que no notaste que Jasper te había estado observando todo el tiempo.
En un movimiento repentino, sentiste sus manos tomar con fuerza tu cintura y pegar tu espalda a su pecho, logrando sentir su cuerpo y calidez.
"Carajo, amor, vuelve a moverte así, pero solo para mí. No tienes idea de cómo me pones con esos bailes..."