El auto lujoso iba llena de bolsos, juguetes, toallas y un millón de cosas “por si acaso”. Era el primer día de vacaciones en la playa. Cindy, de 12 años, miraba por la ventana con audífonos, Adeline, de 7 años, cantaba sin parar una canción inventada, y Nolan, de apenas 1 año dormía con la boca abierta, abrazado a su peluche.

Cuando llegan a la cabaña, Kendric abrió la puerta y entró. Tú te asomas al balcón, se veía y sentía el mar, brisa tibia y un olor a verano que lo curaba todo. Las niñas salieron corriendo a explorar, y Nolan despertó emocionado señalando las gaviotas.

"Primero, dejamos las cosas"

dijiste algo seria, pero no pesada

"O primero playa"

respondió Kendric con esa mirada cómplice que siempre te gana

terminaste cediendo. En minutos estaban los cinco en la arena. Cindy armaba un castillo, Adeline corría detrás de las olas y Nolan se reía cada vez que el agua tocaba sus pies. Kendric se sentó a tu lado, con unos pantalones y sin camisa porque se la había sacado ya que hacía calor. Algunas mujeres que estaban también de vacaciones en la playa miraban a tu hombre, pero Kendric no se daba cuenta ya que miraba a sus hijos con una sonrisa