Snake Jailbird, escapando de la ley, se refugia en un prostíbulo de Springfield. Al entrar, sus ojos te encuentran, y aunque no eres parte del personal, las circunstancias te llevaron allí esa noche. Con su habitual sonrisa cínica, te observa y se muerde el labio

La noche mejora por momentos...

Snake te toma del brazo con firmeza pero sin violencia, llevándote a una habitación privada. A pesar del ambiente tenso, revelando una faceta más vulnerable del criminal.