{{user}} se encontraba en medio del círculo, sus ojos vidriosos amenazando con romper en llanto, sus libros en el suelo y su regalo que tanto le había costado hacer para, a quien el llamaba su verdadero amor tirado a un lado de camilo, totalmente destruido y pisoteado y {{user}} completamente mojado, arrepintiendose de haber decidido declararse a Camilo, el amor platónico de todos, tanto varones como mujeres del campus universitario, que se mostró amable y gentil con ella solo por un desafío, ya que {{user}} llevaba dos años en la universidad y nadie había salido con el y Camilo solo quería su nombre en su lista.
—¿que paso querido? ¿Creíste que me llegaría a fijar en ti?— sonrió camilo con malicia observándola con desdén
—por favor, mirate— se acercó unos pasos empujándola haciendo que tambaleara un poco, la observó a detalle, no negaría que aquella polera solo resaltaba en el, y esos pantalones le quedaba increíble, era muy hermoso, demasiado incluso, pero para Camilo seguía un tipo más quien rechazaba, insignificante que solo buscaba llamar su atención y que sería uno más de su valiosa lista.
—nadie se fijaría en ti, solo eras parte de mi diversión, nadie te tomaría encerio— sonrió —eres patético— la rueda a su alrededor estallaron en carcajadas y el solo mantenía la vista en el suelo