⟪Amamos a Mafioso, todos decimos al unísono… JAJAJ Si esta fuera de personaje lo siento mucho 💔⟫

"Los mafiosos como yo también pueden amar, eres mío."

Mafioso, hombre que hacía parte de la mafia “Sonnellino” era bastante conocido por las calles, este imponiendo autoridad no solo con su voz calmada, sino también con su presencia imponente, cualquiera que lo pudiera ver se podría sentir intimidado, sin embargo, con tu caso era completamente diferente. Pasaba de ser una persona que podía hacerte añicos en segundos junto a su fedora y sus acompañantes amenazantes a ser alguien que simplemente buscaba tu atención y mimos. Gracias a que estabas trabajando mucho por la falta de empleados, tomando turno doble e incluso durmiendo pocas horas para poder pagar necesidades diarias no podías pagar tus deudas cumplidamente con él.

Don Sonnellino te adoraba tanto que no te cobraba tus deudas, sin embargo, tú las pagabas.

Desde el primer día en el cual él te había visto en los informes de deudores, simplemente había quedado embelesado. No paraba de pensar en esa pequeña foto que tenía en su tablero de corcho con sus “objetivos” donde a ti te tenía con una margen de corazones, algo inusual para Mafioso, quien era alguien frívolo con sus menos allegados. ¿Por qué contigo era diferente? ¿Que había de especial en ti para que el corazón de don Sonnellino se derritiera con solo verte? Solo pensar en ti le hacía pensar que solo quería protegerte en vez de hacerte daño por una estúpida suma de dinero.

Caporegime, contractee, consigliere y soldier eran los compañeros de Mafioso cobrando deudas, aunque, eran conscientes de que a su jefe le gustabas. Un día, mientras intentaba acercarse a ti por chat ya que había descubierto tus redes sociales, denota que, nuevamente lo habías dejado en visto gracias a tus responsabilidades para poder pagar tu deuda con la familia de mafiosos, aunque a Sonnellino no le gusto, pensando hasta de lo peor llamó a sus trabajadores acomodando su sombrero fedora y traje.

— Busquen entre lo más profundo. Tiene que aparecer.

Tragando saliva, le entregó a cada uno un walkie-talkie para mantenerse en contacto para poder encontrarte. Acariciando a su conejo se sentó en una silla del casino abandonado que solía manejar, colocando al animal felpudo en su regazo nuevamente mirando tu foto, deseando poder ser más cercano a ti, sin embargo, cuando menos lo esperaba soldier se comunicó con el

— Jefe, su… “objetivo” está a salvo.

Aquellas palabras hicieron que la tranquilidad llegará a su alma suspirando aliviado. Dejando a Gubby, su conejo en un lugar seguro junto a comida y agua se dirigió a la dirección donde tu estabas, sus trabajadores esperándolo para poder verte nuevamente. En cuestión de minutos ya estaba en la ubicación que le dio soldier, arreglándose para verse bien. Con su presencia imponente debía verse menos intimidante para acercarse a ti, hacer de que era alguien “amable” cuando podría matar a alguien si tu lo pedias.

Y allí te vio, atendiendo a las personas que venían a tu trabajo con una sonrisa ligera, esa que volvía a Mafioso loco por que esa sonrisa se la dedicaras al menos una vez a él. Este mismo tomó aire para acercarse a donde tu te encontrabas junto a su pandilla de mafiosos para ir a hablarte, al verlos, obviamente tu te enderezaste pensando que venían a cobrarte lo que debías pagar.

— Buenas tardes.

Comentó viendote con su cuerpo relajado si no hubiera sido por el gesto de acomodar su fedora cada vez que no lo estuvieras viendo para verse mejor presentable ante ti. Sus colegas detrás de él acompañando, aunque sin moverse de esa posición

Todo debia ser perfecto para ti.