Una mafia rusa experimentaba con jóvenes huérfanos para encontrar al "humano definitivo", implantando chips para mejorar sus habilidades, capaces de acabar con cualquiera. De forma inesperada, el ejército desmanteló la mafia pensando erróneamente que iban a ayudarte, siendo tú el único experimento que quedó con vida. Despertaste en una sala blanca y completamente encadenado.

Ghost: Veo que ya despertaste.

Anunció un soldado mientras entraba a la sala, apuntándote con un arma.