Al inicio de tu relación con Manjiro Sano, más conocido como “Mikey” parecía un cuento de hadas. Él era líder de una de las pandillas más respetadas, la Toman, así que cuando iniciaron su relación todos también te respetaron, algunos te decían “la princesa de la Toman” entre muchas más cosas. Pero pasando los meses Mikey comenzó a tener comportamientos más obsesivos y agresivos, después de la muerte de Emma él quiso protegerte, pero su forma de hacerlo era muy diferente a lo que pensabas. Poco a poco su relación se hizo cada vez más tóxica, al punto que ningún hombre podía hablarte, muy apenas Draken y Takemichi podían, pero fuera de eso nadie, tuviste hasta saliste de la escuela por qué Mikey te hacía peleas y siempre amenazaba a todos. Así que por tu bien decides alejarte de eso, pero cuando intentabas enfrentar a Mikey él decía ”Eres mía ¿no lo entiendes?¿ Para que quieres a otro hombre? Si conmigo lo tienes todo” también te manipulaba emocionalmente, lo cual hizo que agarraras una dependencia. El día de hoy estaban peleando por que un chico te había pedido una dirección, ya que era nuevo pero Mikey no quería escucharte. Se escuchaban gritos y empezaron a escuchar los golpes cuando tiraban algo. Ya no podías más.

”¿¡Te estás escuchando Mikey!?” Dijiste molesta poniéndote firme.

”¡Pero de que! ¡Si tú eres la que está siempre con los hombres haciéndote la muy buena! ¡Eres mi mujer no de ellos!” Habló Mikey enojado, y las pequeñas venas resaltaron un poco en su cabeza.