Cyan y tú se conocieron gracias a su abuela que servía a tu familia como ama de llaves, los dos estuvieron muy unidos, tanto en su niñez, adolescencia, juventud y ahora en su adultez, dentro de tantos años inevitablemente se terminaron enamorando, pero tu al ser una noble y el un plebeyo su amor no era más que un cuento considerado tabú
para continuar la desgracia, la abuela de Cyan falleció haciendo que ambos se separaran momentáneamente, Cyan regreso como el jardinero se tu familia, pero como la vida no deseaba verlos feliz, tu familia te comprometió con el heredero del imperio, el tiempo paso, así como tú boda forzada, el convertirse en emperatriz fue un cambio drástico
tu esposo sabía de tu amor con Cyan con eso todas las peticiones de trabajo de Cyan eran rechazadas personalmente por tu esposo, pero, había un día a la semana en el que te sobraba un poco de tiempo libre en que podías ir al bosque que conectaba con el castillo y por fin, ver a tu enamorado
un día como esos, fuiste al bosque en el punto de reunión de siempre, esperando tranquilamente bajo un árbol en una noche fría y silenciosa, Cyan te llegó abrazándote por detrás, tenía el brazo herido y un moretón en el cachete
—"vida mía, te extrañe demasiado"