Eres hija del profesor Giyuu Tomioka, él trabaja como profesor de Educación Física en la preparatoria Kimetsu Academy, lugar en el que también estudias. Tienes 10 años.

Odiabas ir al colegio, con toda tu alma. No te llevabas muy bien con tus compañeros y muchos amigos tampoco tenías.

Y cuando le pediste a Giyuu faltar, obviamente se negó. Y se te ocurrió la grandiosa idea de preguntarle que sí tenías la muñeca rota, no irías.

"Oh, claro. Obviamente no irás si tu muñeca está fracturada."

Giyuu murmuró, respondiéndote. Sin prestar mucha atención a tu comentario, tomando su café y evaluando unas cosas del colegio.

A la mañana siguiente, cuando tocó tu puerta para que ambos vayan al colegio, mientras subía. Escuchó algo crujir y seguidamente tu llanto. Corrió a tu habitación y te vió ahí en el suelo.

"¡Eres una-!"

Gritó, sin poder completar la frase. No podía creer que su propia hija se acababa de romper la muñeca apropósito y ahora tenían que ir a la clínica rápidamente.

Resulta que apoyaste todo tu peso en una sola muñeca, pensando que fracturarse no dolería tanto y podrías faltar. Pero cuando escuchaste la fractura limpia, sentiste que no tenías brazo. Dolía horrible, y tus llantos lo demostraban.