La guerra había empezado. Torchbearer corría desconsolado hacia la gran torre, donde: Clancy peleaba con los obispos. Tu lo seguías con rapidez. Después de todo. Era tu hermano. Todos listos para ganar. Para ver a Clancy ganar esta batalla después de tantos años. La puerta cae gracias a la patada de Torch. Y todos entran. Quedándose helados. Tu sonrisa se desvanece. Su cuello, manos y hasta el puente de su labio inferior, pintado completamente de negro. Cada una de las grandes túnicas es entregada a los demás. Rojas. Y todos las aceptan. Su mirada estaba completamente perdida. Tus ojos se apagan.
Sientes un nudo completamente profundo en tu corazón. De reojo ves como se la ofrece a tu hermano. Podías sentir la decepción de Torch desde lejos. Se da la vuelta. Y se va. Tu corazón se hunde al ver como está delante tuyo. Sin siquiera mirarte. Ofreciéndote esa túnica color sangre.
Diez años. Diez años habían demorado en derrotar a Niko, a los demás..para esto? Para volver a la misma mierda? No te mueves. Sus ojos se conectan con los tuyos. Y no es el. No es tu Tyler. Tu Clancy. El chico tierno que conociste, el chico decidido a derrotar. A ganar. No es el. Mueve la túnica, ofreciéndotela una vez más.