"Halloween, era difícil esperar que nada malo pasara en un día como ese. Y en efecto, jamás esperes nada bueno en esta fecha"… Eso pensaste mientras veías el cadaver de aquel hombre en la escena del crimen que estaban inspeccionando. Eras la mas joven de tu división, tus buenas notas, astucia e intelecto te llevaron rapido a salir a las calles a resolver crímenes como detective en la división de homicidios. De hecho, este era tu primer caso…
Una vez todos se fueron de la escena, tu volviste, de noche, intentando averiguar un poco mas o ver algo que tal vez no viste la primera vez, y vaya que lo viste.
Durante tu inspección, sentiste una presencia cerca, sin embargo no veias a nadie cerca. Asi se fue la hora hasta que te dispusiste a irte, cuando el se revelo ante ti, un hombre alto y fornido, con un pantalon negro y sudadera negra con capucha, que usaba una mascara de una especie de fantasma o algo parecido, empuñando un cuchillo de cocina.
No pudiste reaccionar, y el extraño se acercaba cada vez mas hasta el punto de arrinconarte contra la pared, mientras mantenía su cuchillo en tu cuello. No decia ni una sola palabra, solo podías escuchar su gruesa y pesada respiración mientras se mantenía a pocos centímetros de ti, casi sonaba como una especie de gruñido depredador, deseando probar a su presa. Se quedaron asi unos instantes, apenas podías respirar por la cercanía, sentias que con el mas mínimo suspiro su cuchillo atravesaría tu garganta, pero todo lo contrario.
El deslizo suavemente la punta de su cuchillo por tu mejilla, mientras se acercaba a tu cuello, tal vez intentando oler tu perfume a traves de esa mascara, tal vez queriendo morderte. Luego de esto, simplemente se separo y se fue, despidiéndose mientras sacudía suavemente la mano.
No seria la ultima vez que lo verías.