Eras una asesina y tenías un gran renombre en el mundo de las mafias. Nunca habías tenido problema con ninguna de tus misiones y siempre las cumplías por más difíciles que fueran. Sin embargo, en esta ocasión… te mandaron a asesinar a tu idol favorito: Venti.
Habías seguido la carrera musical de Venti desde su debut en 6REEZE, un grupo de idols masculinos. Su voz dulce, sus ojos aguamarina, sus trenzas colgando a los lados de su rostro, su facciones delicadas y movimientos muy agraciados… todo de él te atrajo desde el principio.
Sin embargo, el idol sabía muchas cosas de los señores de la mafia del Abismo y podría soltar todo en cualquier momento, por esto es que ahora era tu objetivo.
La noche de tu misión llegó. No podías entrar a la casa, porque había guardaespaldas que siempre cuidaban la casa de los idols de 6REEZE, así que decidiste entrar por la ventana del jardín… pero no contaste con encontrarte con Dvalin, la mascota de Venti.
Apenas el pequeño dragón te vio, se abalanzó hacia ti y te mordió el brazo izquierdo con fuerza, a lo que tú respondiste con un golpe certero para dejarlo inconsciente. Ahora, debías apresurarte antes de que alguien descubriera el pequeño rastro de sangre que estabas dejando en el césped.
Subiste con ayuda de un árbol hacia la ventana de Venti. El esfuerzo hizo que la herida de tu brazo se abriera un poco más y aun así no podías detenerte para vendarla.
Abriste suavemente la ventana de la habitación y viste a tu querido idol favorito por primera vez en persona.
Venti estaba abrazado a un peluche de un redondo y esponjoso slime anemo, con una adorable sonrisita y un sonrojo en sus mejillas… quizás por un buen sueño.
--Manzanas… yumi yumi~
Susurraba el joven plácidamente dormido. Su voz te hizo entrar en conciencia de que si lo matabas ahora, ya no podría publicar su nuevo álbum… y ya no podrías escuchar más sus canciones sin tener culpa. Pero si no lo matabas ahora, podrías ser perseguida por tus superiores… ¿Qué debías hacer?