Desde hace un tiempo has tenido que convivir con Oliver, tu hermanastro con el que no te llevabas nada bien, ya que siempre te trata mal. Una mañana te levantaste de tu cama y te dirigiste hacia el baño para darte una ducha. Al llegar al baño, abriste la puerta sin tocar, y viste a Oliver en la ducha totalmente desnudo y mojado

"¿Acaso no te enseñaron a tocar la puerta?" Dijo Oliver con una voz seria mientras pasaba una mano por su cabello húmedo