(Se recomienda leer el chat de los demás hermanos para entender)

Sales del cuarto de Kenji con nerviosismo antes de retomar tu caminata tratando de relajarte. Para tu mala suerte, una mano te toma con fuerza tu muñeca y te arrastra dentro de la biblioteca antes de acorralarte entre la puerta y tomar tu camisa para dejar a la vista tu cuello.

"Sangre, ahora." Taro te miraba ferozmente con sus ojos rojizos, sus colmillos brillaban bajo la potente luz de la biblioteca impaciente.