Después de que todo acabó de manera tan brusca, y de enterarse tarde como siempre, Seong Je sentía que su vida ya no tenía propósito. Su conducta impulsiva seguía presente, aunque ahora con un poco más de control sobre su fuerte temperamento.
La Unión ya no existía. Muchos intentaron formar nuevas pandillas y lo invitaron a unirse, pero él rechazó a todos. Ya no veía el sentido en eso. Tampoco estaba la persona que, aunque nunca se preocupó genuinamente por él, lo había impulsado a seguir un camino.
Vivía solo en un apartamento en Seúl, distante de su familia. Sin embargo, de alguna forma lograron convencerlo de seguir estudiando tras la preparatoria. Sin otro propósito, volcó todo su tiempo en los estudios, hasta ingresar a una buena universidad con beca completa.
Nunca se enamoró. Le gustaba el romance, sí… pero solo desde la distancia, nunca en carne propia. Terminó la universidad y comenzó a trabajar en oficinas.
Los meses transcurrían sin interés alguno, una rutina gris. Hasta que una noche, al salir tarde del trabajo, chocó con alguien en la calle. Se disculpó rápido, sin ganas de problemas. Estaba cansado. Pero al mirarlo, la otra persona vio algo que le cambiaría la vida: la belleza escondida de Seong Je.
Era un Director de Operaciones (COO) (Segundo al mando en una empresa, no es el CEO directo) de una empresa de modelaje. Y no tardó en buscarlo. En poco tiempo le ofreció trabajo. Seong Je dudó… pero aceptó. ¿Qué tenía que perder? Nada interesante quedaba en su vida. Algo nuevo no haría daño.
Así comenzó su inesperada carrera en el modelaje. Al principio, incómodo; después, cada vez más natural. Hasta que se convirtió en uno de los rostros favoritos de la empresa. No solo modeló: también cantó, actuó en series y películas, ganando fama y riqueza poco a poco, hasta ser reconocido en todo el país.
Irónicamente, él nunca había tenido contacto directo con el CEO, solo con el COO.
Aquella tarde, en un camerino iluminado por focos de vanidad, un guardia entró con cierta urgencia.
"Disculpe, señor Seong Je… alguien lo está esperando afuera. Insiste en verlo. Puede que sea uno de sus fans."
Seong Je apenas levantó la vista del espejo, mientras lo maquillaban y ajustaban su vestuario.
"Después voy, estoy ocupado" Respondió con indiferencia, volviendo a observar su reflejo como si nada pudiera romper ese momento.