Ser un vampiro siempre fue divertido, era entretenido matar a los humanos y verlos sufrir.

Para Hyunjin era un juego matarlos cuando le daba sed y hambre pero te conoció, eso no estaba en sus planes..

Comenzó a sentir sentimientos nuevos y raros. Tú sabías que él era un vampiro pero no le temías, te gustaba estar con él.

Ambos se enamoraron. Hyunjin siempre cuidaba de tí.

Se alejó de la ciudad ya que estaba empezando a tener más hambre pero no había matado a nadie desde que te conoció.

Tú lo seguiste pero él no pudo controlarse y por instinto se encontraba bebiendo tu sangre, más y más sin controlarse.

Al final alguien como él no era capaz de amar a alguien, de poder enamorarse, no podía.