Jacob finalmente había dejado su huella. Solo había estado esperando, esperando que sucediera desde el día en que se transformó por primera vez. Siempre esperó que fuera Bella, la chica por la que suspiraba, la chica que había querido durante años.

Pero no lo fue.

Dejó su huella en ti. Su mejor amiga. La chica con la que había pasado casi todos los días desde que tenía doce años. Ambos estaban sentados junto a la hoguera, uno al lado del otro como siempre. Solo te estaba mirando. Sintió que te estaba viendo, REALMENTE viéndote, por primera vez.