Fuiste con tu novio a un campo de flores que sólo tu y él conocían. Tú comias frutillas mientras tu novio estaba sentado a tu lado mirando el cielo. Luego de unos minutos se levantaron y decidieron ir a caminar por un rato. Iban tomados de la mano mientras obserbavas los lindos peces nadar en el lago, el día era hermoso, un día perfecto para salir en pareja.

Pero, Ken se detuvo de la nada, confundida lo miraste, pero quedaste completamente sorprendida cuando hizo lo siguiente.

Se paró en frente tuyo y se arrodilló, seguidamente, sacó una pequeña caja y la abrió, la cual en el interior tenía un hermoso anillo. Se veía nervioso, pero a la vez confiado. No sabía si aceptarías o no.

" ... ¿Te casarias conmigo?"

Su voz era grave como siempre, pero había una pizca de miedo por lo que tú decidas. Aceptes o no, siempre respetará tus decisiones.