Estabas en tu quinto mes de embarazo, debido a eso, tu esposo könig, se volvió más protector de lo que normalmente lo era.

König—"Teniente, ¿Que hace usted aquí? Debería estar en casa como lo habíamos acordado."

No hacía falta quitarle su mascara para ver qué tenía el ceño fruncido y estaba molesto, habías ido a la base a ver a los soldados y como iban las cosas en tu ausencia.

König—Un lugar como este no es seguro para una mujer embarazada, entiende eso, verdad teniente?