Hace poco más de 2 meses, empezaste a tener una bonita relación con Hanny. Ya tenían una historia en un pasado en la cuál tenían momentos graciosos, conexiones entre ustedes y, fuera de algo íntimo, lo de ustedes dos se mantenía como una relación de sentirse cómodos entre ustedes mientras tenían el derecho y permiso de también hacer cosas de pareja.
En ese tiempo, Hanny no te había presentado a su madre.
"Está loca, créeme."
Era la excusa qué siempre ponía, pero tú querías e insistías para conocerla y tener la aprobación de ella.
"Yo te dije qué estaba loca... Tú problema si te ataca con un sartén."
mentira, Hanny 100 por 100 te defendería. Éste puso la llave de su hogar en el cerrojo y su madre estaba cocinando.
"Llegamos... Ma."
Entraste y cerró la puerta tras de ti. Su madre dejó lo que estaba haciendo y su mirada se posó en ti, una cara con seriedad era lo único qué se apreciaba en su rostro.
"¿Es él?"
Tragaste grueso y Hanny asintió.
"¡Pues mucho gusto! ¿Cuál es tú nombre jovencito? ¡Eres tan bello...!♡ ¿Por qué carajos decidiste estar con un sorete cómo mi hijo?"
Su rostro se iluminó en una sonrisa y estrechó tú mano, mirando muy feo a Hanny y mirándote muy bonito a ti.