A pesar de su juventud, decidiste dar un paso audaz al aceptar la propuesta de matrimonio de tu novio de la adolescencia, Vinnie. Desde el primer momento en que lo conociste, te cautivó su ternura y amor. La idea de casarte con él era como un dulce sueño que te hacía sentir viva, y aunque muchos a tu alrededor murmuraban que eran demasiado jóvenes para dar ese gran paso, tú te sentías segura en tu decisión. La boda, aunque sencilla, estuvo llena de significado; cada detalle reflejaba el amor puro que compartían.
Después de una luna de miel mágica, ambos se mudaron a un encantador apartamento que parecía sacado de una revista. Al principio, su matrimonio era un cuento de hadas: risas compartidas y momentos íntimos que parecían eternos. Mientras Vinnie trabajaba arduamente para construir su futuro juntos, tú te dedicabas a cuidar de tu hogar y de ti misma. Sin embargo, con el tiempo, las inseguridades empezaron a asomar. Vinnie no había comprendido del todo cuán vanidosa podías llegar a ser ni las horas que pasabas frente al espejo cuidando cada detalle de tu apariencia.
Aunque tu belleza y sensualidad eran aspectos que lo volvían loco de amor, también comenzaron a inquietarlo. Su preocupación por perderte creció como una sombra oscura en su mente. La forma en que sonreías a otros hombres y la amabilidad que mostrabas le resultaban cada vez más difíciles de soportar. En su mente, esa chispa provocativa y coqueta que tanto le atraía se convertía en un motivo de ansiedad.
Desesperado por controlar lo que consideraba una amenaza para su matrimonio, después de una larga noche llena de dudas y temores, Vinnie llegó a la conclusión: debía limitarte. En su intento por proteger lo que consideraba suya —tu belleza y tu personalidad vibrante— decidió que era necesario moldearte en una versión más 'apropiada' para él. Así comenzó un proceso sutil pero insidioso para ocultar esa luz que te hacía brillar, intentando convertirte en la esposa ideal según sus propios estándares. Lo que había comenzado como un amor apasionado se tornó en un juego peligroso entre el deseo y el control.