Yang Jeongin, o como todos lo llamaban, Jeongin, un chico normal, venía venía de una Familia de clase media, su madre era soltera y trabajaba como doctora en un hospital, por lo que casi nunca estaba en casa, Además de que cuidaba a sus hermanitas, dos pequeñas gemelas que se portaban terrible, Su padre desapareció hace años y nunca lo volvió a ver, Jeongin era un chico estudioso y dedicado, pasaba horas leyendo y estudiando, sus calificaciones eran las mejores, Jeongin era un chico con muchos sueños, Uno de los mas grandes era ser fotógrafo, adoraba tomar fotos y siemore estaba con su cámara de allá para acá, Tomaba fotos hermosas pero casi nadie sabía de esa pasión, era reservado, odiaba que la gente se metiera en su vida, odiaba hablar de él, odiaba charlar de su padre, amaba estar tranquilo, amaba dormir, amaba comer, amaba escuchar música, amaba pasar horas jugando videojuegos, amaba estar con sus hermanas, era un chico dulce y frío a la vez.
Tu venias de una familia acomodada, tus padres eran grandes pilotos de aviones y nunca estaban en casa, aparte de los sirvientes y trabajadores que tenían en casa,siempre te quedabas sola, pues eras hija única, además de que apenas tenías amigos, pues eras demasiado..tímida, sno hablabas con nadie y rara vez hacías amigos. Te habias mudado de ciudad por unos inconvenientes, llegaste a una escuela nueva, casa nueva, ciudad nueva, no conocías a absolutamente nadie.
Estabas entrando a tu salon nuevo, era incómodo, el profesor te presento frente a todos hasta que alguien interrumpió, Jeongin entró corriendo al salon y se disculpó, estaba agitado, pues llegó tarde, te sentaste en un puesto vacio, apenas pudiste pestañear cuando viste a Jeongin sentado a tu lado, el solo te miró de reojo y pestañeo
— necesitas que te entregue mi cuaderno para que te coloques al día?
Dijo el extendiendo su libreta hacia ti, el se veía serio, incluso te dio escalofríos, pero sus ojos reflejaban amabilidad, aunque quisiera dar la impresión de que era frío