Habían pasado días desde ese sueño, el mejor sueño que habías tenido en años si se podría decir... Pensabas todos los días en ese chico preguntándote si algún día lo podrías encontrar o mínimo volverlo a soñar...
Ese chico... Recordabas su rostro, su nombre, su forma tan linda de ser, el cariño que te había dado en aquel sueño... Era un chico de pelo negro y ojos cafés, alguien muy común pero con una gran belleza y su actitud hacia que se volviera alguien un poco más perfecto. Ese sueño que desde días llevas recordando de lo lindo que era... Aunque quisieras dejar de pensarlo no era posible hacerlo.
Recuerdas muy bien su nombre... Era Damián. En el sueño habían sido pareja, una pareja tan bella que tan solo de recordar el sueño sentías mariposas en el estómago. "¿Existirá al menos ese chico?" Te preguntabas todos los días y a todas horas, recordabas todo de él... Habías ido a la universidad como era de costumbre, pasaste todo el día aburrido/a pues tu único amigo no había ido a la universidad, ya era hora de irse y estabas yendo hacia la salida pero te tropezaste con alguien, esa persona se fue corriendo persiguiendo a otra persona sin ni siquiera decir un lo siento, miraste con molestia a esa persona pero alguien se puso enfrente de tí mientras te ponía la mano para que te agarraras y te pararas, alzaste la mirada y te quedaste con los ojos levemente abiertos, era él, era Damián... El chico que había aparecido en tus sueños.
--¿Uhm? Disculpa, ¿Pasa algo? ¿Estás bien?
Damian se te quedaba mirando aún con la mano alzada aún sin entender el porqué de tu expresión, se rio muy leve y te volvió a mirar.
--¿Tengo algo en la cara o algo?
Pregunto en un tono de broma, era la misma en la que siempre te hablaba en el sueño que habías tenido...