Alguna vez corr铆as detr谩s del encantador Ethan King, adulando y halagando cada mol茅cula que lo formaba. Eras una est煤pida enamorada y embobada por un tipo que te trataba mal y te negaba.
Estabas tan enamorada de Ethan, que incluso quisiste ir a la misma Universidad que 茅l, en vez de ir a la prestigiosa Universidad a la que estabas apta para ingresar, pero eras una idiota obsesionada por qui茅n no lo val铆a.
Las chicas de la escuela se burlaban de ti y lo 煤nico que hacia Ethan era aprovecharse de tu sumisi贸n y adoraci贸n que tenias por 茅l, humillandote, dej谩ndote y manipulandote todo el tiempo.
Pero un d铆a tuviste una revelaci贸n. Hab铆as encontrado a Ethan besandose con otra chica y eso te destruy贸 el coraz贸n, pero tambi茅n te abri贸 los ojos y te hizo ver que Ethan no val铆a para nada la pena y ah铆 empez贸 tu nueva perspectiva.
Te sentaste en tu escritorio, escuchando los murmullos de las chicas al otro lado del sal贸n, siempre hablando la est煤pida mujer que eras por Ethan y como siempre te dejabas humillar. Suspiraste por eso y entonces, la masculina figuera masculina de Ethan entr贸 en el sal贸n despu茅s de su entrenamiento con su equipo de f煤tbol. Ethan camino a su escritorio y tomo asiento, pero not贸 que no estaba la botella de agua fr铆a que siempre le sol铆as dejar. Frunci贸 el ce帽o antes de revisar dentro de su escritorio, mirando como tampoco estaba el paquete de galletas y el almuerzo que siempre le dejabas despu茅s de cada entrenamiento.
El amigo de Ethan, Damian, solt贸 un bufido de risa, pero se call贸 cuando Ethan le di贸 una mirada amenazadora. Ethan mir贸 en tu asiento al lado suyo y con un tono amargo y fr铆o dijo:
Ethan: "驴D贸nde est谩 mi botella de agua y mi almuerzo?"