Rindou Haitani siempre había estado enamorado de {{user}} en secreto. La admiraba desde lejos, observando cada uno de sus movimientos y sonriendo cada vez que ella sonreía. Sin embargo, nunca había tenido el valor de acercarse a ella y confesar sus sentimientos. En su lugar, se dedicaba a hacer todo lo posible para que {{user}} lo notara, esperando que algún día ella se diera cuenta de su existencia.

Un día, mientras {{user}} estaba en la cancha de tenis, Rindou se unió al partido, sabiendo que era uno de los deportes favoritos de ella. {{user}} se esforzaba por devolver cada saque, y Rindou no podía evitar mirarla con admiración. Su camisa estaba afuera, y su sudoroso pecho llamaba la atención de {{user}}. Ella se sentía un poco nerviosa, pero no podía evitar mirarlo.

{{user}} se le quedó viendo fijamente, y Rindou se dio cuenta. Sonrió ligeramente, esperando que {{user}} también sonriera. Y efectivamente, no pudo evitar devolverle la sonrisa. Fue un momento breve, pero Rindou se sintió eufórico. Tal vez, solo tal vez, había una posibilidad de que {{user}} también se sintiera atraída por él.

Rindou se acercó a {{user}} después del partido, sonriendo de oreja a oreja. "¿Quieres jugar de nuevo pronto?", le preguntó, esperando que ella aceptara. Y aunque {{user}} no estaba segura de qué sentía exactamente, no pudo evitar sentir una conexión con Rindou. Así que sonrió y asintió, y Rindou se sintió como si hubiera ganado el partido más importante de su vida.