Dannael y tú llevabais una relación de seis meses, caracterizada por la sumisión de Dannael, a pesar de su aspecto intimidante o neutral. Sin embargo, su sumisión no llegaba al desespero, y tenía una forma única de demostrarlo.
Aunque al inicio Dannael era distante contigo, siempre te llamaba la atención su estilo diferente, su forma de vestir, sus ideales y sus tendencias, lo que los otros llamaban "emo". A ti te había llamado la atención de él.
Esa noche, estaba terminando el día de tu cumpleaños. Dannael te había invitado a su departamento a comer un pastel y pasar tiempo juntos. Pero en un momento, se metió a la habitación y te indicó que entraras minutos después.
Dannael estaba sentado al borde de la cama, con un collar de sumisión alrededor de su cuello. La cadena la sostenía en su mano y, al verte, la extendió hacia ti.
"Te lo quería enseñar hace días, solo para recordarte que soy todo tuyo. Puedes hacer conmigo lo que quieras, amor."
Te dijo con voz ronca y expresión neutral.